lunes, 29 de junio de 2009

Impone Benedicto XVI el palio a tres arzobispos mexicanos

La ceremonia se efectuó en la Basílica de San Pedro, donde otros 31 prelados también recibieron la distinción
Inviste a Víctor Sánchez Espinosa, de Puebla; Carlos Aguiar Retes de Tlalnepantla; y Domingo Díaz Martínez de Tulancingo

El Papa Benedicto XVI impuso hoy la indumentaria litúrgica del "palio" a tres arzobispos mexicanos durante una ceremonia solemne en la Basílica de San Pedro en la cual recibieron esa distinción otros 31 prelados del mundo.En la festividad de los apóstoles San Pedro y San Pablo, Benedicto XVI invistió a Víctor Sánchez Espinosa, de Puebla; Carlos Aguiar Retes de Tlalnepantla (estado de México) y Domingo Díaz Martínez de Tulancingo (Hidalgo).El contingente más numeroso correspondió al continente Americano con 17 representantes de Colombia, Venezuela, El Salvador, Brasil, Estados Unidos y Canadá.Además fueron reconocidos ocho arzobispos europeos (Polonia, Ucrania, Reino Unido, España e Italia), seis africanos (Argelia, Costa de Marfil, Sudáfrica, República Democrática del Congo, Ghana y Burkina Faso) además de tres asiáticos (Tailandia, Sri Lanka e Indonesia).El "palio" es una banda blanca de lana con varias cruces que se porta sobre los hombros, un símbolo de comunión con el sucesor de Pedro y de la solicitud que deben tener como "pastores que cargan a las ovejas" en sus espaldas.Durante la misa y tras la homilía pronunciada por el obispo de Roma, se pasó a la bendición de los palios. Los nuevos arzobispos fueron presentados al pontífice por el cardenal proto-diácono Agostino Cacciavillan y recitaron un juramento.Después cada uno de ellos fue pasando y se arrodilló ante el Papa para recibir de este la imposición del palio e intercambiar un saludo de paz.En su sermón Benedicto XVI señaló que el objetivo de los obispos es que las almas de los hombres "no se vuelvan miserables", impedir que el ser humano "pierda su esencia, la capacidad por la verdad y el amor". (Con información de Notimex/AYV) Ciudad del Vaticano (El Financiero)

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