Los Camisetas Rojas, en su mayoría gente de campo y pobres de la ciudad, piden la disolución del Parlamento y la realización de nuevas elecciones.
Un hospital importante de la capital tailandesa desalojó el viernes a los pacientes y suspendió casi todas las actividades debido a que los manifestantes antigubernamentales lo invadieron al sospechar de la presencia de fuerzas del gobierno.
Un grupo de los llamados Camisetas Rojas irrumpieron en el Hospital Chulalongkorn la noche del jueves a pesar de las súplicas de su director. Al no encontrar soldados o policías en el sanatorio, los manifestantes regresaron a la zona cerca al hospital que tienen ocupada.
El hospital decidió suspender todas sus actividades, menos las cirugías de emergencia.
El primer ministro Abhisit Vejjajiva, que los opositores pretenden deponer, apareció en la televisión nacional para criticar las acciones recientes de los manifestantes que han paralizado varias zonas del centro de Bangkok.
Los Camisetas Rojas, en su mayoría gente de campo y pobres de la ciudad, piden la disolución del Parlamento y la realización de nuevas elecciones.
Los opositores consideran que Abhisit llegó al poder en complicidad con la elite de la burocracia de Bangkok y el ejército, el cual derrocó a su líder _el ex primer ministro Thaksin Shinawatra_ en un golpe de estado en el 2006.
``No es necesario que yo condene (la irrupción en el hospital) pues la sociedad tailandesa y la comunidad mundial ya lo hicieron'', dijo Abhisit y agregó que el gobierno ``no permitirá ningún movimiento que represente amenazas para la población''.
Más tarde, los manifestantes abrieron una parte de una barricada para permitir el ingreso de vehículos a una de las entradas al recinto del Hospital Chulalongkorn.
Bangkok, Tailandia
Un hospital importante de la capital tailandesa desalojó el viernes a los pacientes y suspendió casi todas las actividades debido a que los manifestantes antigubernamentales lo invadieron al sospechar de la presencia de fuerzas del gobierno.
Un grupo de los llamados Camisetas Rojas irrumpieron en el Hospital Chulalongkorn la noche del jueves a pesar de las súplicas de su director. Al no encontrar soldados o policías en el sanatorio, los manifestantes regresaron a la zona cerca al hospital que tienen ocupada.
El hospital decidió suspender todas sus actividades, menos las cirugías de emergencia.
El primer ministro Abhisit Vejjajiva, que los opositores pretenden deponer, apareció en la televisión nacional para criticar las acciones recientes de los manifestantes que han paralizado varias zonas del centro de Bangkok.
Los Camisetas Rojas, en su mayoría gente de campo y pobres de la ciudad, piden la disolución del Parlamento y la realización de nuevas elecciones.
Los opositores consideran que Abhisit llegó al poder en complicidad con la elite de la burocracia de Bangkok y el ejército, el cual derrocó a su líder _el ex primer ministro Thaksin Shinawatra_ en un golpe de estado en el 2006.
``No es necesario que yo condene (la irrupción en el hospital) pues la sociedad tailandesa y la comunidad mundial ya lo hicieron'', dijo Abhisit y agregó que el gobierno ``no permitirá ningún movimiento que represente amenazas para la población''.
Más tarde, los manifestantes abrieron una parte de una barricada para permitir el ingreso de vehículos a una de las entradas al recinto del Hospital Chulalongkorn.
Bangkok, Tailandia
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